
Cuando llegamos nos dedicamos a reconocer la zona y Paco comprobó la calidad del hielo.

Pero al final nos decantamos por la zona de la Ola para dejar que el resto de cascadas sigan engordando y nos dejen disfrutar de sus encantos. Así que pasamos el día con otros dos asturianos en la Ola.
La temperatura constante -2 y las cascadas creciendo
